Top 10 de asesinos de relaciones

Hay muchos factores que pueden afectar a un buen matrimonio, pero normalmente son las pequeñas cosas, las que a veces ni nos damos cuenta, las que más afectan. Para asegurarnos de que nuestro matrimonio sobreviva aquí os dejo algunos de los asesinos de relaciones que todas las parejas tienen que tener en el punto de mira.

1. Familia: el número uno de lo que más estresa a las parejas poco tiene que ver con su relación sino más bien tiene que ver con las relaciones que lo rodean. El rol de vuestros padres, cuñados, primos, amigos trastocan el momento en que dijiste “Sí, prometo”, porque cuando te uniste como si fueses uno solo, elegiste poner a tu pareja por encima de todos los demás y a veces no es así. Muchos matrimonios están luchando simplemente por una carencia de prioridades y se encuentran a ellos mismos puestos en segundo lugar. Los matrimonios saludables aprenden a escogerse primeramente el uno al otro por encima de los demás.

2. Falta de comunicación: Es verdad que la mayoría de las parejas invierten solo unos pocos minutos al día en conversaciones de calidad. Es fácil dejarse arrastrar por la vida y parar de conectar y conversar con el que amas. Pero lo peor es vivir una vida neutral o indiferente con tu cónyuge ya que los problemas vienen cuando dejamos de movernos hacia delante en nuestra relación. Toma un tiempo más a menudo para conectar y comunicarte con tu pareja.

3. Estrés: Es muy fácil sacar nuestro estrés con nuestra pareja. Podemos caer en el hábito de guardarnos las cosas hasta que estando en la seguridad y el confort de nuestro matrimonio explotamos. Desde problemas financieros a enfermedades, pérdida de trabajo, etc; los matrimonios saludables intentan superar el estrés juntos por medio de la confianza el uno en el otro, comentando las cosas entre ellos y compartiendo la carga juntos.

4. Tecnología: Leí un post en un blog sobre un hombre que se divorciaba pero lo curioso era que se divorciaba de su móvil. La verdad que esto tenía mucho sentido porque muchos de nosotros llevamos ese peligroso asesino de relaciones en nuestro bolsillo. En este mundo de locos por la tecnología, de poner posts en Facebook compulsivamente, de llevar solamente Iphones, no es extraño encontrar parejas que ya casi no invierten tiempo en tener una intimidad. Desenchúfate, desconecta, apaga el móvil e invierte en tu pareja.

5. Egoímo: El matrimonio nos enseña una gran lección contra el egoísmo. Así que o dejamos que la experiencia nos haga mejores o nos volvemos más egoístas. Poner al otro primero es una tarea difícil porque nuestra naturaleza nos impulsa a ser egoístas. Cada vez que decimos «sí» a nosotros mismos estamos diciendo «no» a nuestro matrimonio porque el matrimonio no se trata de una lucha de él contra ella, se trata de un nosotros contra nosotros.

6. Falta de perdón: perdonar y recordar sin dolor no es una tarea sencilla. Cuando fallamos en darnos cuenta de lo importante que es perdonar, mantenemos la herida en nuestro corazón por mucho tiempo. Más adelante esas heridas empiezan a hacer mella en nuestras vidas desde dentro hacia fuera. Perdonar no es acerca de excusar a la otra persona por lo que ha hecho sino de recibir libertad y sanidad del Dios que nos perdona a nosotros una y otra vez. Al perdonar te liberas de esa carga.

7. Perder los límites: Solemos pensar que la estrategia ofensiva es la mejor, olvidándonos que la defensiva es también importante.Podemos estar haciendo todas las cosas correctamente mientras seguimos fallando en mantener fuera las cosas que son dañinas para nuestro matrimonio. Dibuja un círculo alrededor de tu matrimonio, y protégelo guardando vuestras emociones, vuestras conversaciones y la manera en que invertís el tiempo y con quién lo invertís.

8. El pasado: La cosa más paralizante que podemos hacer para nuestra relación es definir a nuestra pareja por su pasado en vez de definirla por lo que es en el presente. El pasado puede impactar nuestras vidas, pero sólo controlará nuestro presente si se lo permitimos. Es importante ser realista el uno con el otro sobre vuestros pasados, pero más importante es respetar el pasado de cada uno viendo en lo que se ha convertido tu pareja ahora en el presente. Olvida lo que está detrás para que puedas moverte hacia lo que está por delante.

9. No ser sincero: ¿Por qué una pequeña mentira es tan peligrosa como una grande? Porque las dos tienen el mismo impacto en la intimidad. El ser sincero en tu matrimonio es como esas cadenas que os mantienen unidos. Quitando un enlace de la cadena o 10 enlaces provocará su separación. Si has cometido errores en tu relación o has estado escondiendo cosas a tu cónyuge, ahora es el tiempo de buscar la verdad y confesar porque una relación ligada al no ser sincero no es una relación.

10. Orgullo: “Yo soy el mayor problema del matrimonio” esta es el lema del trabajo de Paul Tripp en el campo de las relaciones. Hay que reconocer tus propios errores y equivocaciones en vez de culpar a los de tu alrededor, pero el orgullo puede hacer esta tarea un poco complicada. Es más fácil apuntar con el dedo y esquivar la culpa. Pero en el momento que dejas de lado tu responsabilidad dejas de lado tu matrimonio, porque no importa el asunto que tengas entre manos, siempre afecta a los dos.

Es hora de considerar dónde habéis bajado la guardia antes de que los “intrusos” que habéis dejado entrar acaben con vuestra relación.